[todo lo que tengo se lo he pedido prestado a mi imaginación]


14 abril 2010

Credo.

De a poco me enseña a ser, y yo me dejo enseñar…
Y aprendo a besar a pesar del enojo, y a dormir de la mano, aún cuando hayamos peleado…
Y me dejo domar, y voy soltando las riendas… él me ama más, para que aprenda
Que amar era otra cosa, y le abro el frasco a aquella mariposa…
Y de a poco le da un nuevo significado a creer, a pesar del pasado,
Vuelvo a confiar, aún sin poder ver
Que él me ama, independientemente de lo que ya haya amado.
Porque me ama, y eso se siente… y sentir, eso también se aprende.
Y voy dejándo moldearme para ser, de sus manos, obra y arte.
Entonces, de pronto, nadie me obliga… me siento libre y eso hace que vibre.
Puedo soltarme, él lo ha enseñado con gestos y palabras, lo he comprobado.
Si amarme así, lo acerca tanto,
Ojalá pueda enseñarle yo de algunas de mis cosas…
Quizás le guste al menos,
Cuando le canto.

11 abril 2010

I love you since I knew you...

Roxanne, quién te ha dado semejantes curvas?
Quién se puso sobre mi vereda, caminando sensual, mirándome, cual gato desafiante?
Quién te dijo, Roxanne, que a mi no me ibas a gustar?
Quién decreta mis placeres mentales, Roxanne?
Cuando te miro, imagino pornografía entre tus muslos. O me veo sugiriéndote con los ojos el camino a recorrer.
Roxanne, suavidad. Roxanne, olerte, tocarte, beberte. Roxanne, sabrías encontrarte conmigo. Roxanne, sabrás hallar mis rincones. Roxanne, planeo hacer con vos todo eso que nadie aprobaría. Ay, sí que probaría!
A ver, Roxanne, quisiera ser tu criatura celestial. Mirame, minón argentino. Quizás me alcance sólo con eso, con mirarnos. Y te dedique varios gemidos, quizás con eso nos alcance. Será que las chicas sí lloramos, quizás con eso nos alcance. Será que nadie más se atreve a pensarlo?
Con soñarnos tipo tres de la mañana, cuando nadie nos escuche recordarnos con la puerta entreabierta del baño, quizás con eso nos alcance...





06 abril 2010

Carrousel

Me siento apretujada. Un poco nerviosa. Taquicárdica.
Es el Otoño, estación que amo, que me sacude mostrándome las hojas caídas del pasado.

No estoy tan grave. No quiero estarlo.
Es esto parte del esfuerzo por aprender a evitarlo.
Me pesa el piso desde los pies hasta el cervix, me pesa en exceso la luminosidad nocturna sobre los párpados.
Es inexplicable, quizás no sepa cómo contarlo. No sé si sé decirlo. Sé resistir, y eso es tanto!
En el camino elijo, siempre distinto a lo explorado. Algo mejor yo puedo, es parte de avanzarlo.
Es doloroso el miedo. Perder cualquier detalle es mi fantasma. En sobrevivirlo está el encanto.
No odio lo que tengo. Tampoco lo domino. Vivo una mitología interna, vivo en mi propio laberinto.
Hoy he logrado parar, antes del horror y el espanto, puedo decir que aprendí y eso en mi mundo vale.

Vale por un paquete de garrapiñadas y otra vuelta gratis.