[todo lo que tengo se lo he pedido prestado a mi imaginación]


30 junio 2015

Reptil

Esa necesidad de apoyar todo lo mío sobre un otro.
Mis ideas, sobre tus realidades. Mis tetas, sobre tu espalda. Mis manos, sobre las tuyas. Mi hogar, sobre tus pantalones. Mi inseguridad sobre tus certezas. Mi fracaso sobre tus no rotundos.
Mi nuevo rumbo se apoya sobre tu puerta y sale volando cuando vos me dejás parada, muerta de frío, ahí.
Vuelo. Vuelo-vuelo-vuelo y volé aunque era de noche y no tan tarde. 

Despisto. Lleno mi vida de puntos de apoyo para poder avanzar y, siempre que un punto flaquea, vuelvo a vos.
Pero vos no estás, la puerta sigue cerrada y aunque me saludes, sonrías y todo aparente estar -de a poco- volviendo a la normalidad, no estás.
Mi nuevo rumbo es desconocido. Se impulsa en tu puerta, en una esquina, en un no firme y absoluto, pero es tan incierto el lugar hacia dónde me va a llevar que me hace un nudo en la cabeza y un moño en el estómago.
Mis pies sobre tus piernas. Mi libro sobre tu mesa de luz. Mis labios sobre tu frente.

Y yo queriendo aprender a pararme, finalmente, en dos patas. 

21 junio 2015

Platónico

Tu barba, la risotada burlona. El color de tus ojos. La manera de decir "fenómeno".
Tus manos y todas sus particularidades.

Un libro. Arena adentro de las zapatillas. El último abrazo y el frío de los pies en ese preciso instante. La escalera a oscuras. Nuestro miedo. El beso que no me diste, ese beso que no reclamé.
Doce años buscando entre sueños finales distintos para un único final.
Un hombre clavado como una espina. Un nombre que no se repetirá jamás. Una mujer que yo ya no quiero y todo lo que te importa tres carajos porque no tenemos arreglo.

17 junio 2015

Esquina

Estuve pensando que "esquina" es una palabra hermosa.

Además, para nombrar a una esquina tenés que decir dos calles, como dos personas, que se juntan... como vos y yo abrazándonos.
Decís "la esquina de" y es como recortar ese momento en el que dos que se quieren -ponele que podamos ser vos y yo- se encuentran y se saludan con cariño.

- Hola, Yatay!

- Hola, Lezica!

Y nos abrazamos.


Te veo ahí, en media hora, en la esquina de nuestro abrazo.

¡qué linda palabra es esquina!

15 junio 2015

Lunes estándar

Puede estar despejado
de  un turquesa que duele ver
y fresco, increíblemente helado,
cortándome la cara.

Puede que sí.
Quizás.
Lo que seguro está es ausente. Vacío. Insignificante. Mediocre. Corto. Desperdiciado. Creíble, visible, tangible. Nada sorprendente.
Está corriente, común. Aburrido.

Ojalá le sangre un ojo a Dios y llueva sangre esta tarde. O se descuelguen nubes y caigan como carteles sobre la cabeza de la gente apurada volviendo del trabajo a casa. O una bandada de murciélagos pase volando antes del anochecer.
O te cruce en el supermercado.

10 junio 2015

Común denominador

Me pregunta: "Tenés alguna historia complicada? Estás en alguna así, de esas que no podés soltar?" y yo le cuento un poco de Flor. Le hablo de lo bien que la pasábamos, de los cien días con noventa y nueve noches, la fiesta y la abrupta despedida. Trato de minimizarlo, como si no encajase en una respuesta a su pregunta y a la vez queda claro que de ahí yo todavía no salí.

La miro sabiendo que deseo estar entrando en la mujer que me haga terminar con el pasado. Lo deseo, un poco lo presiento. Es bella, no una hermosura impecable sino de esas más accesibles. Pero tiene en la mirada algo que me llama y me arrastra hacia su interior. Es, además de atractiva, interesante. La manera de tratarme, de enredarse conmigo y con mi mundo. Sus cosas, su casa, sus libros. El gato, el cabello, el perfume. Me gusta y eso me reconforta. 


Le cuento y me desato los borcegos. Me quedo en medias y la miro que cocina en apenas vestido y rodete. Hace frío pero ella cocina así, despojada. Cebolla pluma, unos brócolis; me escucha y toma del vino que recién le serví. Hace algunas preguntas al pasar. En realidad quizás no la conmueve lo que digo, no parece llamarle demasiado la atención. Me molesta esa indiferencia que se marca tanto. Para qué pregunta? Será que ella necesita contarme algo? La observo, sigue en silencio cortando ajíes.

"Y vos? Vos sí tenés una historia compleja? Complicada? Una que no podés borrar?", se la disparo. Es tan evidente que espera eso para contarme de alguien que no puede olvidar; dale, te escucho -pienso.
Se sonríe, con una mezcla melancólica de pena por mi y pena por ella. Amaga un silencio, deja la cuchilla. Toma vino. 
"La historia compleja soy yo. Siempre soy yo la historia complicada de los demás."